domingo, 21 de noviembre de 2010

Soy fosfórica y llevo semillas de mijo en las orejas


Desde pequeñita he tenido jaquecas. Mi hermana las tiene, mi madre las tiene y mi abuela las tenía. Así que es, digamos, una "tradición familiar" (o una herencia genética muy cabr*n*)

Todo el/la que ha tenido jaquecas sabe lo que es, así que no me voy a extender en explicarlo. El caso es que para mí eso supone dolor, incapacidad para hacer vida normal cuando sucede y cajas y cajas de medicinas a lo largo de mi vida, que preferiría no tener que tomar.

Y eso me llevó hace unos meses a la consulta de "mi" médico naturópata.

Aparentemente es un médico de lo más convencional, con su salita de espera con revistas clásicas del corazón, su bigote y su bata blanca.
En fin: ni túnicas de colores, ni olor a incienso al entrar (qué desilusión)

Luego cuando entras a la consulta, te das cuenta de que suena una musiquilla new age bastante chula, y que en las paredes hay posters con los puntos de acupuntura, y que por alguna razón misteriosa en la ficha del paciente hay un dibujo de un ojo, una oreja y un pie.

Y entonces las preguntas: qué te ha traido aquí, qué haces, en qué trabajas (a qué dedicas el tiempo libreeeee....) No me mira la lengua, ni me ausculta, ni me mide ni me pesa. Me tumbo en una camilla y me manosea un órgano interno (luego me entero que es la vesícula biliar) y entonces empieza lo bueno:
Me dice que soy fosfórica, y me explica que las migrañas tienen relación con un mal funcionamiento de la vesícula... según va hablando me va colocando agujitas de acupuntura. Así, sin avisar, aprovechando que estoy tumbada en la camilla sin zapatos y no puedo salir corriendo!
(Nah, la verdad es que no duele. Pero no me lo esperaba, jo)

Después de un ratillo con las agujas, me las quita y me hace crujir toda la espalda, desde el cuello hasta la cintura, haciendo giros muy desagradables (aunque tampoco son dolorosos) Para terminar el despliegue de habilidades, me coloca cuatro semillas de mijo en las orejas pegaditas con un esparadrapo, que tengo que llevar hasta que se caigan. Y me receta unos granulitos homeopáticos que tengo que tomar todos los días. Vamos, me hace un completo!

Desde ese primer día llevo ya unas cuantas sesiones, y no sé si puedo decir que las jaquecas han disminuido, más bien no, aunque quizá sean menos intensos :S
Sí es cierto que últimamente estoy yendo dos sesiones por semana e incluso me hace sesiones gratis, que yo creo que ya se lo ha tomado como algo personal.
Soy una chica muy disciplinada y me tomo todos lo que me manda, así que entre la acupuntura, los crujimientos y los gránulos espero acabar librándome de mis dolores.

Ya os contaré...

No escribo ná!

Jo. Tengo ideas sobre las que escribir pero se las come el tiempo... que se me escapa en otras cosas!!

Qué vida más achuchada...

domingo, 10 de octubre de 2010

jueves, 19 de agosto de 2010

Taller de alimentación consciente

El fin de semana pasado fuimos a Madrid, a participar en un "Taller de alimentación consciente" organizado por Gabriela y David, de "¡Vida en tu comida!"

"¿Y eso qué es?" os preguntaréis. Pues bien, estoy un poco espesilla, así que a ver si lo explico fácil: básicamente la idea es hacerse conscientes de todo lo significa la alimentación (nos da energía para movernos y para pensar, ayuda a construir y reparar nuestro cuerpo y también nos da sustento emocional) y tratar de acercarse a una alimentación basada en una comida más natural, menos procesada y más vital.
¿Y de qué manera conservan los alimentos todos sus nutrientes, vitaminas, minerales...? Pues crudos!

Así que pasamos una mañana hablando sobre todo esto, y aprendimos un montón de cosas sobre nutrición y cocina crudivegana, batidos verdes y tooooodo lo que se puede hacer sin cocinar (no solo las típicas ensaladas que a todos se nos vienen a la cabeza, sino incluso pan, "queso crema" de frutos secos, sopas, tartas...) Fue un taller muy interesante, que finalizó con una comida en la que probamos todo lo que habíamos preparado y alguna cosilla más.

Además Gaby y David son una pareja majísima, se explican muy bien y de manera muy sencilla y transmiten mucha dulzura en lo que hacen. Salimos de allí muy inspirados, y dispuestos a poner en práctica muchas de las cosas que habíamos visto, empezando por la rutina de los batidos verdes.

Yo me enamoré de este sacapuntas de verduras, que hace unos espaguetis de calabacín preciosos y riquííísimos (la salsa también ayudaba, qué BUENA!!), y también salimos encandilados por este otro aparatito que es como una batidora pequeña, y te permite no solo hacer batidos, sino triturar, picar verduras, frutos secos, hielo, hacer salsas sin enmarranar mucho...

Bueno, así que estamos explorando la comida cruda y los efectos que tiene en nosotros... por lo que seguro que va a haber unos cuantos posts al respecto de ahora en adelante ;)

miércoles, 11 de agosto de 2010

Carabelas portuguesas

Marijuano (a.k.a. Caníbal) y Wildberry, asesores gubernamentales para resolver la crisis causada por la plaga de medusas carabelas portuguesas en las costas españolas xD


(Click para ampliar)

Más tiras, aquí

martes, 10 de agosto de 2010

De vuelta...

Pues después de una temporadilla larga sin actualizar, vuelvo por estos lares... a seguir contando cosicas de mi vida vegetariana y la convivencia con el Caníbal y mis dos amores gatunos.

En este paréntesis he estado bastante ocupada (muy, muy ocupada, mucho!), pero mi propósito es actualizar a partir de ahora con más regularidad... a ver si lo hago posible! ;)

Así que... reiniciamos!

PD.- También estoy de prueba con los cambios de plantilla, que acabo de descubrir cositas nuevas de Blogger...

lunes, 22 de marzo de 2010

Tortilla de patata vegana

El maestro de las tortillas de patata es el Caníbal. Yo, lo confieso, no sé hacerlas. Bueno, tampoco me he puesto, así que a lo mejor me salen estupendamente :P
Pero en fin, que siempre las ha hecho él, y muy bien.

El caso es que vimos la receta de la "tortilla sin huevo", usando harina de garbanzo y agua. Y al técnico maestro tortillero le picó la curiosidad.

Así que después de encargar la harina de garbanzo en mi herboristería de confianza (que es de esas cosas que no tienen de forma habitual), este fin de semana ha sido "la prueba".

Y ¡QUÉ BUENA!! El resultado ha sido de nota. La verdad es que yo no tenía las expectativas muy altas, ya que había leído opiniones para todos los gustos. Pero le salió estupendamente, creo que da el pego de una manera más que digna, y además está muy-muy buena.

Tomó como referencia esta receta de El delantal verde, pero la adaptó un poco. Sus proporciones utilizadas fueron las siguientes:

INGREDIENTES (tortilla mediana):

Para el "huevo":
- Harina de garbanzo.
- Agua.
- Vinagre de manzana.
- Pimentón dulce.

La proporción es una medida de harina de garbanzo por cada dos de agua, en cantidad suficiente para cubrir el relleno en la sartén, igual que si se utilizara huevo. Se añade un chorrito o cucharada de vinagre a la mezcla, para disimular el sabor de la harina de garbanzo, que puede amargar un poco (según dicen)

Para el "relleno":
- Patata.
- Un poco de pimiento rojo.
- Un poco de cebolla.
- Un poco de calabacín.

Se corta la patata en rodajas gorditas, la cebolla en medias lunas y el resto de ingredientes en daditos (o al gusto de cada cual, según haga uno la tortilla de patata)

Se cocina en la sarten , con aceite de oliva a fuego lento hasta que todo esté blandito.

Entonces se añade la mezcla de "huevo" y se deja cocinar por un lado. Cuando esté más o menos cuajado, se da la vuelta con ayuda de un plato, y se deja cocinar por el otro.

Cuando esté hecha, sacar. Dejar enfriar para que se asiente.
Antes de hincarle el diente
Vista del interior, después de darle un buen repaso

Al Caníbal le quedó muy rica, jugosa y suave (quiero más, quiero más!!) A mí me gustó más templada, y a él más fría... pero igual que nos pasa con la tortilla convecional ;)

A comerrrrr!!